Marbella de mis amores

Y ahora que el verano está llegando a su fin, aquí van algunas impresiones que he sacado de mi querida Marbella:
Hay dos Marbellas, eso lo tengo claro. 
Del pirulí para allá (hacia el centro) y del pirulí para acá (hacia Banús)
La Marbella de la gente normal, de la gente de a pié, del centro, de tascas y chiringuitos, de fiestas en bares y copeteo, vamos, la del 90 % de los españoles en este momento.
De aquellos que no pisan Puerto Banús ni por recomendación. 
Es raro que un Marbellí de pro se pase por Puerto Banús mas de dos veces en todo el verano.

Y luego existe la otra, la de los extranjeros, la de los ricos, la del Glamour y las fiestas, la de las Galas de beneficencia y los vestidos de lentejuelas y brillos.
Rusos, Árabes, Holandeses, italianos,ingleses han copado Puerto Banús y lo han hecho suyo, que duda cabe...

Con mi padre y mi hermana. De gala

La Marbella de los joyones, las eternas sesiones de peluquería, la de las uñas impecables y la ropa imposible (e imponible)…
Yo vivo en medio, esa suerte tengo, e igual me voy a comer unas gambas al California con mi amiga Sandra y mi amiga Vero (la Vero), que me pinto el ojo con mi súper eye-liner de Benefit y me planto en Los Bandidos (que honor hacen a su nombre) para comerme una Fricassé de verduras. 
Así de chula soy….

Con mi amiga Ruth y Aless,en la Fría.

El otro día alguien me dijo que lo bueno de ser claro, honesto, directo y normal era que uno podía "triunfar" en ambos ambientes. 
Lo mejor de no ser "afectado", de no pretender aparentar, es que en ambos ambientes te aceptan, te quieren y te respetan. 
Los de allá porque valoran la naturalidad y autenticidad ( algo de lo que ellos carecen) ya que intentan ocultar por todos los medios su, en muchos casos, humilde procedencia y los de acá porque pudiendo ir de "algo" eres mas normal que un bocata de morcilla.

                                  Con mi amiga Sandri, en Finca.

En el caso opuesto, Los "Snobs"solo pueden encajar en un ambiente, el suyo, y en el de la gente que son como ellos. 
En cualquier otro ambiente "cantan" como El Conde Rudy o Beatriz de Orleans en "La taberna del Altamirano"
Me encantó la reflexión de mi amiga Valeria. 
Nunca me había parado a pensarlo….
Mi corazón pertenece a la primera, la del Pirulí para allá ( no olvidéis que yo soy de Moratalaz), el barrio de Alejandro Sanz y la Reina Leticia, pero me divierte de morir la segunda.
Me divierte por su extravagancia, su originalidad, su flora y su fauna, su diversidad y su mezcla de culturas. 
Me divierte porque es el único sitio de España donde uno puede vestirse de Gala para ir a cenar y no dar el cante. Dónde todo está permitido, o muy vestida o casi desnuda, que más da, nadie se extraña.

Tomando una Pizza en Banús.

Pero en Marbella, siento decirlo, por lo general se viste mal.

El dinero ni da la clase ni la educación.Gracias a Dios eso no se compra y ahí todos estamos equiparados.
Por supuesto que encuentras a gente muy bien vestida, de esos o esas que te hacen girar la cabeza y despiertan tu admiración, pero son los menos. 
Hay gente que sabe vestirse, pero lo normal es que la gente vaya como un árbol de Navidad. 
Aquí Coco Chanel se volvería loca, eso seguro.
Su máxima de "Cuando salgas de casa mírate al espejo y quítate algo"caería en saco roto.

Aquí los brillos, lentejuelas, encajes, pailletes, frus frus, volantes y demás parafernalias campan a sus anchas hasta para ir al Mercadona.
Marbella tiene moda propia, no me extrañaría que en cualquier momento se propusiera una Fashion week Marbellí (si no está inventada ya….).
Me pasa a mi que cuando quiero ponerme un pantalón negro y una camisa me siento como si fuera a ir a la oficina.
El pantalón negro, la falda negra, la camisa blanca. Eso es para Madrid. En Marbella, el negro ni para funerales.
Mi armario es mitad Marbellí mitad resto del mundo.
Ocurrió que cuando me marché a vivir a Milan mi amiga Claudia de Genova estaba en Marbella conmigo y me ayudó a preparar la maleta.
Cada prenda que sacaba del armario recibía una negativa por su parte.Era impensable vestirse así en las estilosas noches Milanesas. En los dos años y medio que viví en la ciudad de la moda, me di cuenta que de haber hecho la maleta sola, me hubieran tomado por loca, o friki, u otra cosa…

Viendo el partido Brasil- Colombia en Trocadero

El otro día mi amigo Bashir me vió llegar a Finca Besaya con una falda tubo negra y un top de leopardo, que dejaba poquísimo a la imaginación, y me preguntó si venía de misa…
Esa es Marbella. La del pirulí para acá...
En Marbella puedes ir a cualquier restaurante y cenar al lado de Sean Connery o Florentino Pérez,  la gente es solidaria y aunque sea por dejarse ver y por diversión, no dudan en desprenderse de un buen puñado de miles de euros para ayudar a una buena causa.
Las dos Marbellas no se mezclan. Parecen ciudades diferentes y en cuanto pones un pié en Olivia Valere, Suite del Mar o finca Besaya entiendes rápidamente quien pertenece a una y quien a otra.
Es un juego que a mi me encanta practicar y se me pasan las noches muertas observando a la gente.
Creedme que no intento desmerecer de ninguna manera a la gente que no es de aquí. Ni mucho menos y los que me conocéis sabéis que no hay en mi ni una pizca de snobismo ni prepotencia. Simplemente es algo que se nota.
Igual que cantaría mogollón ver a Cristina Szekely  cenando en "La Fría" resulta chocante encontrar a gente del centro de Marbella en Olivia Valere.
Es gracioso cuando ves descender de los autobuses a gente"de fuera"que llegan de excursión a Puerto Banús a ver a "Los ricos", los barcos, los Bentleys y las tiendas que miran desde una distancia prudente no vaya a ser que también cobren por mirar….
En Marbella todo es caro y a los restaurantes que tienen un precio asequible no se puede casi ni entrar sin hacer 1 hora mínimo de cola.
En Banús te cobran por una pizza 27 euros y si ya tomas postre y vino, entonces tienes casi que lavar los platos.
Los Marbellis aseguran que se vive mucho mejor en invierno( éste de 17 grados). 
Ni colas, ni atascos, ni peleas, buen tiempo, sol y tranquilidad. Los restaurantes te sirven rápido y bien, no frío y congelado como en Agosto.
Pero lo que no se sabe de Marbella o al menos no se habla es que es una ciudad de deportistas.
Todo el mundo, el que más o el que menos, hace cualquier tipo de deporte. 
Es una ciudad ideal para practicarlos. 
Buen tiempo para correr , jugar al golf y al padel, un mar ideal para deportes acuáticos (padelsurf, surf, etc…), para el ciclismo,  baloncesto femenino en primera nacional, gimnasios por todos lados, áreas para crossfit...
En Marbella existe el culto al cuerpo, la gente se cuida, le gusta estar bien y es que para aguantar las interminables noches Marbellis hay que estar pero que muy en forma.
Marbella es un paraiso. Tiene de todo, para todos los gustos, y nosotros por supuesto la libertad para elegir si queremos cruzar el Pirulí o no.