Cuando yo era pequeña era en los países subdesarrollados, aquellos llamados "países del tercer mundo"aquellos en donde se pasaba hambre. Aquellos en donde los niños no comían y nos enseñaban las monjas aquellas enormes barrigas por culpa de la desnutrición.
Que lejano veíamos aquello. Realmente nos parecía otro mundo, no se si el tercero pero desde luego nos quedaba muy muy lejos.
No es que en mi casa fuéramos ricos ni mucho menos. Ni siquiera "pudientes", éramos normales, trabajadores, humildes…
Nunca jamás faltó de comer. Comíamos nuestros lenguados, verduras, legumbres, frutas variadas. Nuestra nevera estaba llena. Porque en los año 80 el ser pobre significaba eso. Comer de maravilla, ir a un buen colegio y no faltarte para vestir. Ahora, en cambio, aquí, en España, en nuestro país, ser pobre significa no tener para comer, ir a pedir a las parroquias, a los comedores sociales, beber leche caducada de 4 meses(y con mucha suerte) y hacerles un bocadillo pan con pan a nuestros hijos para "engañar" el estómago. Ahora nosotros somos el tercer mundo, somos nosotros el país subdesarrollado.
Un pais en el que mas de 5 millones de personas no tiene trabajo, donde familias antes pudientes tienen que acudir en masa a comer a los comedores sociales( aquellos que agachan la cabeza, porque todavía los hay que prefieren pasar hambre por no bajar de escala social). Un país donde los niños donde mejor comen es en el colegio (y eso que la mayoría tienen subcontratados catering), un país en el cual ha desaparecido la clase media, esa ya no existe…
Un pais corrupto, donde los políticos se cubren unos a otros, donde algunos policías se crecen con su uniforme y matan a un pobre desgraciado de una paliza delante de testigos en plena calle. Un país donde se ha hecho del sálvese quien pueda el himno nacional.
Nos echábamos las manos a la cabeza con Colombia , se nos llenaba la boca cuando hablábamos de la inseguridad ciudadana en Buenos aires, sacábamos pecho cuando decíamos que en Brasil no se podía ir con joyas ni con reloj por la calle, que te mataban por unas zapatillas en medio de la calle. Decíamos que el DF era la ciudad más insegura del mundo, se nos helaba la sangre con los secuestros, los atracaos en plena calle….
Pues señores, atémonos los machos porque como esto siga así estamos encaminados a eso. O es que creéis que un padre (y una madre) no harán lo que esté en su mano para dar de comer a sus hijos? Hasta que punto se podrá condenar el hurto para dar de comer a una familia cuando los sinvergüenzas que nos han llevado hasta aquí siguen viviendo a todo trapo sin faltarles de nada? Con sus chóferes, sus buenas casas, sus buenas mesas, sus restaurantes….SINVERGUENZAS!
Pero a mi los que más me preocupan son los niños. Ellos no han tenido culpa de nada. Ni de la burbuja inmobiliaria, ni del deterioro de la productividad, no saben de hipotecas ni de finanzas, no tienen culpa de que en España se haya vivido tantos años por encima de nuestras posibilidades.
Que culpa tienen ellos? Si ni siquiera habían nacido…
Sinceramente, me da mucha pena todos los conflictos mundiales que hay fuera de muestras fronteras por los cuales tanta gente y tantos niños están sufriendo : Filipinas, Siria, Ruanda, los litigios fronterizos de India y Pakistan por Cachemira, la interminable guerra entre Israelis y Palestinos, la franja de Gaza, la respuesta a la hegemonía Americana, el terrorismo islámico. Son tantos…
Pero lo que realmente en este momento me indigna es lo que me queda tan cercano. Los niños españoles.
No deberíamos permitir que ningún niño en España no tuviera sus 3 comidas al día, tres buenas comidas. Nuestros hijos son el futuro de este país arruinado, aquellos que algún día deberían volver a situar a España en el lugar que le corresponde y que un puñado de sinvergüenzas se ha encargado de expoliar.
No podemos permitirnos una generación perdida, niños tristes, desmotivados y hambrientos, no puede ser.
No podemos como siempre dejar el tema en manos de la iglesia, de Caritas y despreocuparnos pensando que ellos lo van a arreglar.
Los grandes supermercados deben tomar conciencia de que no se puede tirar la comida. Los alimentos perecederos (esos que se cambian diariamente) tartas, pasteles, pan, deberían llevarlos a un comedor social de cualquier ayuntamiento.
Nosotros, la gente de a pie, debemos seguir donando alimentos. Salsa de tomate, leche, azúcar , harina, pasta.. Cuanto nos cuesta echar en el carro este extra de alimentos para dejarlo en el comedor.
Sabéis cuanto?1 triste euro que vale un paquete de arroz???
El gobierno debe de dejarse de subvenciones inútiles como a la federación de mujeres progresistas, o a los propios sindicatos, o a la organización de mujeres feministas del estado español, o si no a la coordinadora española para el Lobby europeo de mujeres.
Cuando hay mas de un millón de familias sin sustento estatal les regalan dinero a estas? Para que?, para que sigan dándoles su voto en el futuro y así poder seguir mamando de la vaca 4 años más?
Venga por Dios…
Y por último, los mecenas, los que tienen tanto, los de los yates y casas en Ibiza, los futbolistas de los 10 y 15 millones de euros en publicidad, los presidentes de clubs de fútbol, los banqueros, los hosteleros, los nobles, los empresarios…
Dejémosnos de visitar africa para luego salir en el Hola y de intentar "ayudar" con los problemas que nos quedan tan lejos. Empecemos por los nuestros, que no son moco de pavo. "Piensa global y actúa local".
Os propongo sigáis el ejemplo de Amancio Ortega y aquel donativo sin precedentes que hizo de 20 millones de euros a Caritas para paliar el hambre en España.Un donativo que equivalía a la totalidad del que hicieron TODAS las empresas españolas en 2011.
Se puede seguir siendo rico, claro que si. Pero aparte de tantos reportajes en revistas, tantas fiestas y tanto Twitter, también tenemos la obligación y el deber, aquellos que somos unos privilegiados porque en la lotería de la vida nos salió cara, de arrimar el hombro y echar una mano a estas familias y a estos niños mientras damos con aquellos que nos arreglen este desaguisado…..
Algunos diréis: Y tu que haces?
Pues como redactora de este Blog no hago apología y predico con el ejemplo.Toda la ropa pequeña, usada, o infrautilizada de mis hijos la llevo a Caritas Bilbao (hace tiempo que mis sobrinos dejaron de heredar), antes la llevaba a San Pedro de Alcántara en Marbella. Cuando hago la compra para casa, generalmente los Lunes, meto 20 o 30 euros más en leche, harina, huevos, tomate, ketchup, azúcar y productos de primera necesidad y durante el entreno de mi hijo la llevo a Cáritas.
Es poco, pero menos es nada, no???
PD: Por cierto propongo que este año Freixenet haga su anuncio estrella en un comedor social, que en navidades están a reventar y en lugar de pagar el pastizal a la estrella de turno lo done a Cáritas para echar una mano?
Que enseñen a la mitad de los españoles como pasa la navidad la otra mitad.
Yo desde luego lo agradecería. No corren buenos tiempos para el Glamour, y menos si hay que pagar….
Si quieren, yo lo hago gratis….
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